Si tienes una botella de Pacharán Zoco a mano podrás ver que en la etiqueta damos relevancia a nuestro compromiso de elaborar nuestro pacharán con endrinas 100% navarras. Está claro que para nosotros es importante el origen navarro de las endrinas, pero quizás sea necesario compartir los motivos para que los conozcas cada vez que tomas un sorbo de tu copa de Zoco..

El primer motivo es la coherencia: Zoco es Pacharán Navarro, como también destacamos en la etiqueta y en la contra con la tirilla de la Indicación Geográfica. Y está claro que un Pacharán Navarro debería estar hecho con endrinas navarras. Pero hay más razones que trataremos de explicar.

Tradición: La costumbre de hacer pacharán nace en Navarra hace más de 500 años y se ha mantenido hasta nuestros días. Esta tradición es muy sencilla, recoger las endrinas en los campos de Navarra durante el otoño y mantenerlas macerando en anisado durante tres meses. Nosotros tenemos el compromiso de mantener la tradición al máximo y ello incluye el origen 100% navarro de las endrinas. 

Calidad: Podemos utilizar endrinas de dos orígenes: navarras o importadas. Las importadas se recogen en Rumanía y Bulgaria y se transportan congeladas. Estas endrinas son silvestres pero se recogen por cuadrillas que compiten entre ellos por ser los primeros en recogerlas, por lo que las cogen durante el mes de agosto muy verdes. Al estar verdes tienen menos color y mucha acidez, hay que usar más para obtener un buen resultado a la vista y terminan provocando una altísima acidez en el pacharán. Las de origen navarro, sin embargo, se están cultivando desde hace más de 20 años y se recogen en el momento óptimo de maduración, con mucho color y aroma, y con una acidez muy suavizada. Tienen el inconveniente de resultar más caras por la mano de obra local… pero, ¡qué pocas veces es mejor lo barato! ¿verdad?

Seguridad alimentaria: Una de las herramientas para garantizar la seguridad de los alimentos es la  trazabilidad de todo el proceso de producción hasta llegar a los ingredientes utilizados. En el caso de las endrinas importadas la trazabilidad se pierde al agrupar diferentes partidas en el camión y no tenemos siquiera información de en qué zona o fecha se recogieron las endrinas. Sin embargo en  nuestras endrinas navarras tenemos una información completa: fecha de recogida, ubicación de la finca, número de árboles, fecha de plantación…

Huella de carbono: Está claro, comprar localmente las materias primas es lo que conocemos como kilómetro 0. Nosotros adquirimos nuestras endrinas en un entorno de 20 kilómetros y con ello conseguimos reducir la huella de carbono de nuestro pacharán de forma sensible evitando trasladar frutos recogidos a miles de kilómetros de distancia.

Sostenibilidad: Buscamos aumentar las interacciones positivas con nuestro entorno y reducir las negativas. Con nuestros cultivos de endrinos claramente obtenemos un resultado positivo: aportamos al campo navarro un cultivo rentable y además con árboles frutales que ayudan a aumentar la biodiversidad de insectos y animales. Y los agricultores de nuestros pequeños pueblos obtienen unas rentas importantes con estos cultivos, ayudando de esta forma al mantenimiento de poblaciones en zonas con riesgo de despoblamiento.

Está claro: nuestro compromiso con las endrinas navarras es un reflejo de nuestro compromiso con la tradición, con la calidad y seguridad alimentaria, con la reducción de la huella de carbono y con el desarrollo sostenible.