

EL MOJITO ZOCO
23 Jul 2021
Estos días de calor una de las bebidas con más tirón es el mojito: ya sea en las terrazas, en los chiringuitos de las playas o las discotecas encontramos este combinado entre los más demandados. Pero si antes teníamos claro que el mojito llevaba ron y no hacía falta completar nuestra comanda, ahora proliferan otros tipos de mojitos. Tantos que es fácil que encontremos hasta una carta de mojitos: el clásico de ron junto a novedades combinadas con fresa, fruta de la pasión, coco, mango, banana…
Echamos de menos el que, como comprenderéis, para nosotros es el mojito ideal: el mojito Zoco. ¿Por qué es el ideal? Por supuesto porque lo preparamos con nuestro producto, pero también por varias razones más: su facilidad de preparación, su sorprendente sabor y frescor… y su color que hace que podamos llamarlo el mojito rojo.
¡Descubramos todas estas características preparando uno juntos!
Ingredientes: necesitaremos hielo picado, pacharán navarro Zoco, unas hojas de hierbabuena o menta y zumo de lima o limón.
Ponemos en un vaso una buena cantidad de hielo picado. Tomamos una o dos hojas de hierbabuena o menta, las ponemos en la mano y damos una palmada sobre ellas para abrirles los poros. Es suficiente con una o dos hojas, ¡olvídate de estrujar sobre el fondo del vaso un puñado como hacen en algunos bares! Colocamos las dos hojas sobre el hielo y vertemos sobre ellas el pacharán hasta casi cubrir los hielos; al resbalar el pacharán sobre las hojas disolverán suficientes aromas mentolados.
No hace falta añadir azúcar: el dulzor de Zoco es suficiente y además garantiza que el resultado sea refrescante, y no empalagoso o excesivamente dulce. Por último, añadimos una pequeña cantidad de zumo de lima o limón (si no quieres manchar nada en la cocina incluso puedes hacerte con una botella de concentrado de limón y reconstituirlo con agua). Recomendamos añadir poco limón al vaso y, después de probarlo, añadir un poco más si nos gusta más fresco.
El resultado: un mojito con un precioso color rojo y un aroma fresco, con notas mentoladas que envuelven un suave aroma afrutado. Y desde el primer sorbo una sensación profundamente refrescante con el final característico de nuestro pacharán, con un gran equilibrio entre la astringencia del fruto, una refrescante acidez y un suave dulzor que permanecen en la boca entre notas mentoladas.
Sin duda, una sorpresa en tu casa… y ¡en cualquier bar que nos incluya en su carta de mojitos!